martes, 3 de mayo de 2016

Angustia

Una fuerte angustia se le apoderó del pecho, apareció de repente sin que ella se diese cuenta. Empezó a respirar para tranquilizarse, pero seguía sin irse. Sus ojos empezaron a llenarse de lágrimas mientras seguía pensando el por qué de su estado. No comprendía mucho en que momento su cuerpo había decidido angustiarse, un fogonazo acompañado de un recuerdo le apareció en la mente. Él.
No sabía cuando iba volver a verlo y su subconciente, ya le estaba avisando. 

2 comentarios:

  1. Si... En esos casos es el corazon el primero que habla. Y lo peor, es que nunca le hace caso a la razon.

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